jueves, 1 de diciembre de 2011

Miraba las estrellas y me acordaba de vos. Recién.
De todo lo poquito que somos. Lo grande que es el mantel en el que vivimos. Las vueltas que da el cielo cada día, y las vueltas que nos da a nosotros. Abrazados a él. Y yo doy vueltas cuando te abrazo, porque me hacés volar como un barrilete. Atado a los dedos. Desprendiendo los papeles de colores de las nubes con cada roce.